En el esplendor de las conquistas de Hitler, uno de sus temores creó y multiplicó los campos de concentración.
La Constitución venezolana contiene un principio trascendente: la posibilidad de revocar el mandato del Jefe de Estado. Prerrogativa de los electores que en pocos países del mundo podría no tener desastrosas consecuencias para sus respectivas estructuras de poder.
En las negociaciones del TLC se ha planteado la aspiración norteamericana de patentar algunos descubrimientos de seres biológicos.
El cine aporta momentos prodigiosos de sus funciones, da testimonio de épocas y desata factores de la imaginación y la conciencia.
La política exterior de Bush involucró a Estados Unidos en un conflicto prolongado relativamente irreversible de potencialidad inconmensurablemente dañina respecto de las relaciones internacionales, sus reordenamientos y culturas.
Dos expresiones humanas nacieron al parecer juntas, el teatro y el Estado.
De los Estados del continente americano, el que mas desconcierta por su servidumbre, saqueo y destrucción es el ecuatoriano.
La Trigésima Cuarta Asamblea General de la OEA no despertó ninguna esperanza.
Si no cuestionan al poder, la crítica a la política económica y la moral sin política aportan, circunstancialmente y a pesar de sí mismas, vitalidad al sistema que impugnan. Evalúan a dirigentes del Estado y oscilan entre el descrédito y la inestabilidad. La falta de gobernabilidad termina siendo el problema.
El titular de una revista afirma: «John Kerry, candidato del resto del mundo». La publicación presiente la repugnancia que el otro candidato enfrenta en el 95% de la población del planeta, al que se sumaría la voluntad del pueblo norteamericano mayoritariamente favorable a Kerry.