Las elecciones en Perú descubren la fortaleza de esa nación latinoamericana capaz de asimilar «chinos» y reconocer profundamente a sus «cholos».
La mención de la dolarización, no premeditada decisión económica sino argucia política, generó distensión. El gobierno ganó tiempo y sentó otras bases para sus alianzas destinadas al mismo esquema de poder, aunque posiblemente con representantes frescos.
Diez años de facilidad para uso de la base de Manta y el carácter vinculante del criterio del FMI acerca de la renegociación se conjugaron (y se camuflaron) en la declaración del Presidente Mahuad.
Colombia se plantea la dimensión completa del conflicto. Hace más de un año la revista Semana (abril, 13-20, 98), publicó en su carátula el título: ¿Nuevo Vietnam? Interrogante que dilucida mucho.
La historia es también la de las guerras. Su significado plausible en los grandes, resulta condenable en los pequeños. Así, se acoge a los vencedores.
El precio de la paz fue la derrota de las aspiraciones, invocaciones jurídicas y argumentos históricos del Ecuador.
El día martes 14 de octubre en las primeras horas de la noche el presidente Mahuad se presentó ante el país y transmitió la proposición final: o se acepta la propuesta de los Garantes cuyo parecer será vinculante (y tradujo obligatorio para las partes) o quedan únicamente la paz armada y la guerra.
Toda declinación ideológica adquiere peculiaridades maniqueas. Ante la inconsciente estupefacción social por la evolución, las envejecidas nociones se mutan en imágenes fijas y pautan adhesiones acríticas, posturas unidimensionales y ocultamientos de los intereses en juego. Sus actores disputan recitando un libreto escrito para la inocencia del subdesarrollo.
Los desenlaces asistidos por la conciencia han sido mas trascendentes que aquellos que brotaron de guerras agotadas o tramadas por pretensiones de alcanzar salidas beligerantes a desacuerdos de ínfimo interés mundial.
La palabra del Ecuador que puede ser escuchada en el mundo nace de la profunda identificación entre el pueblo y sus Fuerzas Armadas, y germina en la capacidad de organizar la resistencia victoriosa. Junto a ella, adquiere pleno sentido práctico la objetividad del planteamiento y voluntad de paz que proclama el presidente Sixto Durán-Ballén a…