El tema está planteado hace muchos años. En Ecuador, también. El país debe discutir con amplitud y disposición a renovar sus concepciones.
Los hombres representan los tiempos y los tiempos no son otra cosa que los grados de desarrollo y las relaciones sociales a las que advienen los seres humanos a prestar su voz, su voluntad, su incertidumbre, en fin todos esos quehaceres exhibidos como conductas individuales y colectivas. Por esto, la elección del 3 de noviembre…