Después del derrumbe del socialismo real y del fin, agonía o creación de algunos Estados nacionales se extinguió el ámbito social de esas relaciones. Se impuso un sendero que aún supone la emergencia de una economía mundial articulada como modo de producción nuevo y paulatinamente sustituto del capitalismo tradicional.
En el desierto son nómadas no solo los hombres y sus espejismos, también las montañas y las palabras. El viento se encarga de transportarlas en pocos segundos y, a veces, a grandes distancias sin dejar huella de su existencia.